Redacción: Gustavo Vélez/ Quántica Magazine

Perspectivas y contexto económico en Colombia

Constantemente vemos y escuchamos en nuestra cotidianidad el término PIB o Producto Interior Bruto como un indicador que mide la riqueza de un país. Se supone que las naciones con un PIB más elevado gozan de un mayor bienestar.  por ende es positivo que un país tenga un PIB en crecimiento y negativo que este se contraiga, pero a ciencia cierta desconocemos los pormenores sobre este concepto.

¿Pero qué es PIB?

El Producto Interior Bruto conocido por sus siglas como  (PIB) es la suma de los bienes y servicios finales producidos en un país durante un año.

-Se entiende por bienes aquellos objetos y mercancías tangibles fabricados  como: los carros, casas, alimentos, ropa, entre otros.

-Los servicios son las actividades intangibles que buscan satisfacer las necesidades de los individuos como: la labor de un abogado, los seguros, las comunicaciones, el suministro de energía, la sanidad, la educación etc…

Sin embargo, el PIB no contabiliza la riqueza total de un país, pues no incluye factores como los recursos naturales, infraestructuras, las actividades ilegales y la economía informal.

ESPECIFICACIONES 

El PIB contabiliza sólo los bienes y servicios “finales”, es decir que no se calcula los materiales  intermedios que contribuyen a la elaboración del producto definitivo. Por ejemplo los materiales usados para la construcción de una casa  no se contabilizan en el PIB, sino que sólo incluiría al producto final es decir la casa. 

Además, el PIB sólo se mide a nivel interior es decir es la suma los bienes y servicios producidos dentro de un país, sea por los nacionales o por residentes y empresas extranjeras: si un alemán tiene una empresa en Colombia, su aporte se calcula en el PIB colombiano.

Panorama actual colombiano

De acuerdo a las proyecciones económicas que se han realizado en el contexto actual de la pandemia de la covid- 19 habrá un desplome en la economía mundial, no obstante algunos países se verán mucho más afectados que otros. 

Según  las proyecciones de la Comisión Económica para  América Latina y el Caribe (CEPAL), en esta coyuntura Colombia está en una mejor situación que muchos países de latinoamérica gracias al crecimiento económico que ha estado experimentando en los últimos años.

En el 2019 en Colombia creció en un 3,3% debido a las bajas tasas de interés, las remesas, la inflación controlada, una regla fiscal que mantenía bajo control la deuda pública, instituciones económicas relativamente sólidas y hasta el aporte de los migrantes venezolanos. La inversión también tuvo un crecimiento favorable, 4,6%, impulsada por los beneficios tributarios de IVA para importación de bienes de capital y el crecimiento de más de 10% en obras civiles. Además, el sector financiero creció   5,7%, fue estimulado por la cartera de consumo, de vivienda y comercial.

No obstante el Centro de Investigaciones Económicas de Fedesarrollo estimó que habrá una contracción de la actividad económica superior al 2,7% para el 2020, como resultado de las medidas de cuarentena implementadas por el gobierno para detener el contagio del covid- 19, a esto se le suma el desplome del mercado petrolero y la creciente tasa de desempleo: según el DANE, el desempleo en las 13 principales ciudades de Colombia llegó a más del 23%, que equivalen a más de 5,4 millones de desempleados.

Para la recuperación de los impactos de la pandemia del coronavirus  ael gobierno colombiano le ha sido aprobado un crédito a el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) por la suma de US$850 millones, para fortalecer el desarrollo productivo por medio de la diversificación económica y la inclusión social, así mismo promover la innovación, el emprendimiento y la productividad empresarial. 

Hablemos del dólar 

El dólar en Colombia no ha parado de subir de precio debido al incremento de la incertidumbre en los mercados internacionales. En nuestro contexto nacional siempre que sube el dólar se ven afectadas las empresas multinacionales, además de los consumidores que realizan compras vía e-commerce y las deudas adquiridas en dólares.